Cuando nace,
cuando se muestra,
la calidez de dos manos que resplandecen juntas,
el resplandor de unos ojos,
el brillo de una sonrisa,
tal vez un beso,
diminuto o grande.
No se lo cuentes a nadie,
dejalo madurar,
que llegue a ser,
no te impacientes,
no busques consejo,
no lo extiendas,
Dejalo ser.
Concentralo aquì
y ahora...
-Jose-